Las principales características del Skye terrier son la longitud de su tronco y su pelaje largo y abundante. Existen dos variedades que se diferencian en la posición de las orejas, que pueden estar erguidas o colgantes. Sin embargo, en ambos casos, su tamaño es relativamente limitado y deben tener siempre un abundante fleco que las cubre casi por completo. La cabeza en su conjunto debe ser bastante larga, con trufa negra y grande y hocico fuerte, dotado de una robusta dentadura con perfecto cierre a tijera. El perro se desplaza con paso muy desenvuelto, manteniendo siempre bien recta la línea superior del tronco.